Desde 1821

Sala Blas Cabrera Felipe

IES Canarias Cabrera Pinto

Así era descrito en los libros de la época:

Esta grada [paralelográmica de Valcour], considerada hoy generalmente como una de las mas perfectas, se compone, como su nombre lo indica, de un paralelógramo oblicuángulo (figura 74) formado por cuatro listones de madera, sujetos con travesaños en los cuales van colocados los dientes destinados á hacer la labor.

MUÑOZ Y RUBIO, P. J. (1864), Material agricola. Madrid, Imprenta de Tomas Nuñez. pp. 89.

Las gradas de madera con puntas ó clavos de hierro han debido ser indudablemente las primitivas, y son las más generalmente usadas. La de bastidor triangular es la más sencilla; la paralelográmica de Valcourt es muy buena; la grada Mariposa (figura 59) se va generalizando mucho en España.

ABELA Y SAINZ DE ANDINO, E. (1877), Agricultura elemental. Parte segunda. Madrid, Librería de Gregorio Hernando. pp. 249-250.

Para evitar el balanceo que le harían dar los terrones ó inclinación del terreno, se fija el tiro, no en medio de la cadena, sino á un lado, de modo que la grada ande al sesgo, con lo que se consigue que todos los surcos trazados por los dientes disten igualmente entre sí.

SERRA Y NAVARRO, M. (1879), Elementos de agricultura. Barcelona, Imprenta de Luis Tasso, hijo. pp. 142.